ANTE LAS PRÓXIMAS ELECCIONES DEL 28 DE MAYO

por Jon Ander Etxebarria Garate

Durante estos meses y desde la presentación de la propuesta antisistema Burujabetza-Democracia Directa, cuya línea de acción se basa en crear una organización a nivel asociativo, que sea neutral y no dependiente de gobiernos ni partidos políticos, con el fin de defender los derechos individuales y colectivos de los habitantes de nuestros pueblos,  y, en definitiva, el derecho democrático a decidir nuestro futuro como pueblo y como humanos, ejerciendo, de esa manera, nuestra  soberanía.

Todos los partidos políticos tradicionales, han coincidido en lo que a la restricción de derechos y libertades se refiere, y, centrándonos en Euskal Herria, teniendo claro que partidos como Vox, PP, PSE, Elkarrekin Podemos, no han demostrado autonomía alguna respecto a su marca en el Estado, y, su actuación ha estado inmersa en la antidemocracia más pura. Si nos referimos a los partidos políticos nacionalista (PNV) y de la izquierda independentista (EHBildu), al igual que los partidos centralistas han ejercido ese papel antidemocrático de restricción de derechos y libertades, además de traicionar el espíritu del derecho a decidir como pueblo, al haber usurpado el derecho a decidir tanto individual como colectivo.

Esto no nos debe extrañar, porque el PNV hace años que traicionó a Euskal Herria, por preferir ser cola de león en el estado español, que cabeza de ratón en Euskal Herria, porque ello les ha supuesto con la red clientelar establecida el ocupar las poltronas en Euskadi, y con ello seguir alimentando su clientelismo más absoluto, y, para ello, su política con el estado es la del mercadeo puro y duro, donde al final, y, a los hechos me remito, entramos en el día de la marmota, poniendo, de forma repetida, encima de la mesa, transferencias repetidas a cambio de la aprobación de los presupuestos del Estado.

El mayor despropósito político es el de EHBildu, partido que supuestamente más tenía que haberse posicionado durante la pandemia en contra de la restricción de los derechos y libertades, siendo su actuación todo lo contrario, habiendo sido uno de los más feroces defensores de las medidas restrictivas establecidas, bajo la premisa demagógica de salud vs. Economía. Por otra parte, la coalición independentista durante esta legislatura ha traicionado a Euskal Herria, decantándose por el modelo de Podemos, donde el derecho a decidir como pueblo, de facto, ha desaparecido de su praxis política, mucho más cuando se ha admitido esa restricción de derechos y libertades individuales y colectivos, y, con ello, han perdido toda la credibilidad como defensores del derecho a decidir como pueblo. La evolución de EHBildu lleva el mismo camino, que en su momento, hizo Euskadiko Ezkerra, y, todos sabemos donde terminó esa evolución.

La realidad es que, no ha sido precisamente la partitocracia quien más problemas ha generado a la propuesta, sino un supuesto partido Stop, que con la demagogia de antisistema, ha querido fagocitar a lo que representa Burujabetza-Democracia Directa, utilizando el mismo discurso del empoderamiento de las personas, mediante la creación de las asambleas locales, y, en definitiva, la creación de “batzarres”, pero no explicando con claridad, que Stop como cualquier partido político, tiene su ideario y su estructural piramidal al uso de los partidos políticos tradicionales.

Esto, que hablo de Stop, lo confirma, el que este partido ya existía antes de la pandemia, y, por lo tanto, su actuación no dejaba de ser la de la partitocracia, como se demuestra el que en anteriores elecciones fuese conjuntamente con Equo, que todos sabemos es un partido afín a Podemos, por lo que esa defensa de las asambleas locales, es algo añadido interesadamente, al eje de su ideario político, a diferencia de la propuesta  Burujabetza – Democracia Directa, en la que la premisa esencial es diferenciarse de la partitocracia y el empoderamiento de las personas a través de las personas y su confluencia en las asambleas locales.

La propuesta Burujabetza – Democracia Directa nace del descontento de muchas personas disidentes con el relato de la pandemia , y, otras, que no siendo totalmente disidentes, si que consideran  que no es permisible la restricción de derechos y libertades que se ha llevado a cabo por parte de todos los partidos políticos durante esta pandemia, de manera que se puede incluir, en el lado de la partitocracia al partido Stop, que al igual que Equo, no se han posicionado como tal partido en contra de esa usurpación de la democracia que nos ha impuesto el oficialismo y todos los partidos tradicionales.

La propuesta de Burujabetza – Democracia Directa, en primer lugar ha tenido el problema de necesitar una recogida de firmas, al no ser un partido político al uso. Recogida de firmas que ha sido boicoteada reiteradamente por el partido Stop, al dar a entender que la propuesta Burujabetza – Democracia Directa era la del voto nulo, cuando la realidad es, como voy a explicar, la opción del voto nulo es la consecuencia de, por una parte, los requisitos y las trabas que pone el sistema a cualquier opción de empoderamiento de los ciudadanos, y, en este caso, con el añadido de la actuación del partido político Stop, al dirigirse al mismo nicho de población disidente, tergiversando intencionadamente lo del voto nulo, pero eso si sin explicar con claridad el ideario político de su partido, que si se sabe que fue con Equo, y, por lo tanto, no diferirá mucho del ideario de dicho partido, y, por supuesto, el sistema por ser partido político al uso, no les ha puesto traba alguna.

La propuesta Burujabetza- Democracia Directa ha conseguido firmas y lista de candidaturas para los municipios de Zerain, Zamudio y Aia, siendo el problema en los casos de Andoain y Markina, las trabas burocráticas que pone el sistema para presentar candidaturas, mientras que en el caso de Zumaia con lista de candidatura, no ha conseguido firmas suficientes. En otros lugares como Antsoain, Bilbo, Donostia, Gasteiz, Irún, Eibar, Orio, Gernika, Lekeitio… también se han activado personas en la recogida de firmas que luego han quedado por debajo de poder conseguir el número suficiente.

Los pasos a seguir en estos municipios son, en el caso de los que tienen firmas y lista de candidaturas, son el de presentarse a las elecciones. En el caso de los municipios que tienen lista de candidaturas pero no firmas, la propuesta es que se presenten con esas listas aunque lo vayan a considerar como voto nulo, y en el caso, del resto de municipios, votar con una papeleta que ya está puesta en la web de Burujabetza – Democracia Directa, con el fin de que sea un voto, que se considerará nulo, pero que se identifica totalmente con el voto de los municipios mencionados anteriormente, es decir, plantar una semilla sobre la utilización del sistema a favor del antisistema, ya que en el caso de tener representación electoral las personas que lo consiguiesen serán meros portavoces de su asamblea local, y, en ningún momento,entrarán en el mercadeo de la política tradicional.

El empoderamiento de la asamblea local, es, respetando absolutamente la propuesta de abstención activa, la opción más parecida a ésta, sobre todo en los municipios donde no hay lista a presentar, ya que ese voto nulo soberano, no deja de ser un empoderamiento de los grupos locales, al igual que se tiene que dar cuando se opta por la abstención activa, donde se actúa desde fuera del sistema para confrontar con el propio sistema. La diferencia que se da cuando se pone un pie en el sistema es que, en esa circunstancia, se pone este pie para trasladar lo que decida el antisistema a través de su asamblea local.

La propuesta tiene su principio ideológico en llevar a cabo el funcionamiento y la gestión de las instituciones públicas con democracia verdadera sin partidos políticos, con la recuperación de nuestra democracia, a través de las Asambleas Ciudadanas Municipales, y con cargos públicos en todo caso elegidos libremente por la comunidad, como meros portavoces de esas asambleas locales, sin la injerencia de partidos políticos, y con  el respeto absoluto de los Derechos Humanos.

Se tenga o no representación, estas asambleas deberán seguir funcionando con el fin de poder presentarse desde la ciudadanía mociones al pleno del Ayuntamiento, ya que la intención final de este proyecto es que se consiga que los Plenos de los Ayuntamientos acaben siendo Plenos de las Asambleas.

Con esta pandemia a la sociedad le han usurpado la democracia , es hora de empoderarse y rescatarla.

Bilbo a 15 de mayo de 2023

Jon Ander Etxebarria Garate